A lo largo del camino siempre conseguimos obstáculos, son fuertes, hasta a veces nos intentan hacer cambiar de visión respecto a nuestros objetivos finales. Acuérdate que Dios no deja nada por la mitad, el permanece hasta cumplir la obra, es el ejemplo que requerimos seguir para alcanzar lo que queramos. Pero por supuesto, tenemos que seguir ciertos parámetros para conseguir continuar por al camino de forma indetenible, primeramente se debe tener conciencia de que siempre el enemigo va a desarrollar una estrategia para intentar parar nuestro progreso, de hacernos retroceder, fracasar, en ocasiones el también usa a personas, y otros elementos para causarnos vicios como la depresión, desmotivación, al punto de sentirnos desvalorizados y hasta llegando a pensar en regresar a nuestra zona de comodidad y despreciar todo aquello que con esfuerzo hemos andado para alcanzar lo que queremos. Para mantenernos firmes tenemos que tomar en cuenta estos pasos:
- Solo escuchemos a Dios, esas palabras que nos edifican e ignoremos todos aquellos comentarios u otras cuestiones que las personas hagan con objeto de detenernos en nuestros fines.
- Definamos los objetivos que deseemos, y en nombre de Jesús tomemos acción para conseguirlo.
- Mantengamos oración constante, para alimentar ese vínculo con Dios, que va a ocasionar una bendición en nuestras vidas.
Y se hará realidad ese éxito.