Efesios 1:13-14 ¨En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,.¨- ¨que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.¨
Padre nuestro, este día traemos una grandiosa interpretación de tu palabra, con el objetivo de contribuir a causas cambios radicales en aspecto positivos para todos los que nos nutrimos de estos escritos, extiende tu bendición sobre el mismo, pues con este texto queremos alabarte, glorificarte y esparcir tu mensaje a través de este medio.
Amados, cada uno con su pensar, en ocasiones dando prédicas equivocadas, exponiendo que el mes de agosto, es símbolo de adoración a la actitud de disgusto. Realmente pareciera que sacan esos dichos de los dibujos animados. Más ciertamente, existen alteraciones de la conducta ocasionalmente, pero no existe un mes conmemorativo de esa actitud. Así, la población mundial se encuentra alterada emocionalmente, mostrando estrés, preocupación, irritabilidad y otros signos de desgaste anímico. Esto es causado por muchos factores, entre los principales se encuentran: preocupaciones relacionadas a la satisfacción de aspectos vitales cotidianos, divisiones por conflictos culturales, exceso o carencia de trabajo, entre otras causas. Lo interesante de todo, es que juntos debemos luchar contra esos agentes que ocasionan la infelicidad, y existe una formula garantizada para lograr vencer, esto es teniendo fe en la promesa de nuestro Dios, entregando nuestras vidas a él y posteriormente percibiremos la manera en la que mejora nuestra calidad de vida. El Espíritu Santo es aquel que lleva a los pecadores hasta Jesús, el acto de Jesús en la cruz del calvario nos reconcilió con Dios, su perdón tiene cualidades liberadoras, a fin de que tengamos una nueva vida como hijos adoptivos del padre celestial, ahora andamos según es Espíritu Santo, que es la figura que quedó en el planeta para direccionar las almas hacia el camino del bien, por esto debemos colocar nuestros pensamientos en las cosas espirituales, debido a que si no tuviéremos el espíritu de Cristo, no seriamos hijos de Dios ni perteneceríamos a él, pero ahora tenemos el testimonio del espíritu santo que habita en nosotros, testificando que pertenecemos a Jesús, y somos herederos de Dios y coherederos con Jesús, conforme a las enseñanzas del Apóstol Pablo. El mismo poder que resucito a Cristo, ahora actúa en nosotros que estábamos espiritualmente muertos. Además de todo, el Espíritu Santo garantiza que pertenecemos a Dios, sabiendo esto solo nos queda compartir toda la alegría de la salvación y un buen acto para iniciar esta interacción es compartiendo con todo este mensaje en redes sociales. Recordemos que aquellos que aceptan a Cristo, nacen nuevamente desde el Espíritu Santo, solo así experimentaremos la alegría en nuestros corazones de ser hijos de Dios. Tengamos presente todo el tiempo, que Dios es nuestro padre amoroso y nosotros sus hijos amados, entonces, el Espíritu Santo es la marca genuina de una fe genuina.
OREMOS:
Padre Amado, ayúdanos hoy a recibir a tu Espíritu Santo, que el habite en nuestras vidas para que sea garantía de que pertenecemos a ti, nosotros queremos hacer tu voluntad y ser siervos agradables a ti. Obra en nuestro favor siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen