1 Corintios 3:1-3 “De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo. Os di a beber leche, y no vianda; porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía, porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres? “
Amados, que la Paz de Dios sea con todos, y, su misericordia llene nuestros corazones. Felicidades por estudiar esta palabra de Dios a diario, ella produce frutos en nosotros, y, poco a poco, nuestras conductas van mejorando, y, brindamos e correcto ejemplo al prójimo, que los haga seguir los caminos de salvación, cumpliendo la voluntad de Dios. Recordemos que si algo no crece, entonces, decrece. Mantengámonos creciendo en la fe, y, diseminando este material.
Aquí las palabras de Pablo, son fuertes, y, son palabras de reprensión, claramente son dichas con cariño y con respeto, pero son palabras de reprensión, Pablo estaba escribiendo para una iglesia, que no había experimentado, el crecimiento espiritual necesario, una iglesia que estaba viviendo mucho según la carne, o sea según la naturaleza pecaminosa, por eso el se refiere en estas palabras a la expresión ¨Niños en Cristo¨, en el sentido de crítica o reprensión, la idea es que el crecimiento de estos individuos fue incompleto, por eso se catalogan como ¨Niños en Cristo¨, y, aunque Pablo les dio los conocimientos necesarios, alimentándolos de una manera especial, ellos no pueden hacer nada porque aun son carnales, inclusive habiendo pasado el tiempo, la madurez cristiana, no aconteció hasta ese momento, porque si hay celos y desavenencias, entre ellos, eso demostraría que aun andan conforme a los patrones humanos, de manera que cuando vivimos entre conflictos, vivimos mal. Mucha gente que dice ser cristiana, es problemática, en la última parte del texto bíblico, Pablo nos dice: ¨ pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres? ¨, vamos a tratarnos con cariño, con bondad, con respeto, somos llamados a promover la paz, la unidad, no la guerra, ni la desunión, aso como se espera que un niño crezca y se desenvuelva, de forma natural, y, progresiva, el cristiano, debe crecer en sus experiencias con Dios, volviéndose cada vez más experimentado, y, útil en la obra de Dios, siendo bendición para su comunidad religiosa, y, demás, porque en todo lugar el Cristiano, promueve amor y paz,y, no conflicto y separación.
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OREMOS:
Padre Amado, ayúdanos a crecer en la caminata cristiana, a madurar, a hacerlo a semejanza de Jesús, y, que seamos hombres y mujeres que promueven paz, unidad, y, buenas sensaciones, convirtiéndonos en una bendición para el prójimo. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen