Salmos 22:1 “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación, y de las palabras de mi clamor? “
Amados, que la Paz de Dios sea con todos. ¡Bienvenidos!. Este hermoso lugar se llena de alegría, al percibir que estamos presentes, en nombre de Dios, y, mientras nos congregamos en su nombre, aquí está el. Avancemos juntos con serenidad, y, elegancia, sin prisa pero sin pausa. Nuestro Padre Celestial nos acompaña, y, se complace en vernos cumplir su voluntad. Compartamos este mensaje, y, extendamos la esperanza a todos los rincones, no solo con palabras, sino también con acciones calladas, que griten bendiciones a todo volumen.
Este versículo que estudiamos hoy, nos indica la pregunta que David le hace a Dios, y, que coincidencialmente, Jesús también le hizo a Dios, en el versículo Mateo 27:46 ¨ Cerca de la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?¨, hasta en la Cruz, en momento de gran sufrimiento, Jesús esta citando las escrituras, en su oración, y, en los salmos, podemos ver varias expresiones que se refieren al sufrimiento de Cristo, ejemplo, en el verso Salmos 22:7-8 ¨ Todos los que me ven me escarnecen; Estiran la boca, menean la cabeza, diciendo: Se encomendó a Jehová; líbrele él; Sálvele, puesto que en él se complacía.¨, eso mismo que le dijeron a David, se lo dijeron a Jesús. Veamos Mateo 27:43 ¨ Confió en Dios; líbrele ahora si le quiere; porque ha dicho: Soy Hijo de Dios.¨, fue impresionante que David profetizo sobre el Mesías, sin tener comprensión de eso, cuando David hablaba sobre sus propias luchas personales. Ahora, Salmos 22:16-18 ¨ Porque perros me han rodeado; Me ha cercado cuadrilla de malignos; Horadaron mis manos y mis pies. Contar puedo todos mis huesos; Entre tanto, ellos me miran y me observan. Repartieron entre sí mis vestidos, Y sobre mi ropa echaron suertes.¨. Luego, Mateo 27:35 ¨ Cuando le hubieron crucificado, repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes, para que se cumpliese lo dicho por el profeta: Partieron entre sí mis vestidos, y sobre mi ropa echaron suertes.¨, es impresionante como el salmo 22, se cumple en la experiencia de Jesús, en su sufrimiento en la Cruz, David sobre inspiración divina, al hablar de sus propias luchas, el profetizo el sufrimiento del Mesías, y, su victoria final. En el versículo Salmos 22:27 ¨ Se acordarán, y se volverán a Jehová todos los confines de la tierra, Y todas las familias de las naciones adorarán delante de ti.¨, nuestro Señor murió por nosotros, y, resucito en gloria, y, en el tiempo oportuno vendrá a librarnos, y, nosotros nos postraremos en su presencia, y, lo adoraremos por toda la eternidad, porque Jesús venció, y, la victoria de nuestro Señor, es nuestra victoria, por lo tanto precisamos permanecer firmes en toda circunstancia. Y, mantener la certeza de que Dios nos favorece.
OREMOS:
Padre Amado, glorificamos tu nombre, no nos cansamos de hacerlo, simplemente queremos obedecerte siempre, y, ser mejores personas, a fin de llevar a mas almas hacia el camino de la salvación.. Colabora con nosotros. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen