Génesis 25:19-21 “Estos son los descendientes de Isaac hijo de Abraham: Abraham engendró a Isaac, y era Isaac de cuarenta años cuando tomó por mujer a Rebeca, hija de Betuel arameo de Padan-aram, hermana de Labán arameo. Y oró Isaac a Jehová por su mujer, que era estéril; y lo aceptó Jehová, y concibió Rebeca su mujer.”
Amados, que la Paz de Dios sea con todos. Recibamos bendición en este hermoso día, gracias a Dios estamos aquí, siendo bendecidos para bendecir al prójimo. Continuemos obedeciendo a la voluntad del Padre Celestial. Compartamos esta enseñanza con aquellos que puedan necesitarla. ¡Adelante!
Isaac tenía 40 años cuando se caso, ya era un hombre maduro, y, para infelicidad de la pareja, Isaac y Rebeca, ella era estéril, en aquel tiempo una familia oriental sin hijos era infeliz, sin un futuro prospero, pero mas allá de eso Isaac se preocupaba con el cumplimiento de la promesa, siendo hijo de Abraham, el sabia que de su familia, debería desarrollarse una gran nación, delante de la esterilidad de su esposa, Isaac, hizo lo que deberíamos hacer, delante de un problema imposible de solucionarse, Isaac oro y pidió a Dios, y, es interesante percibir que la oración no es como un sistema de delivery, nosotros no pedimos y luego recibimos, nosotros precisamos esperar, y, esa espera puede llevar años, fue impactante ver que Isaac espero mucho tiempo para recibir la bendición, Isaac tenía 60 años cuando Rebeca dio a luz, Isaac estuvo orando por 20 años, el Señor escucho sus oraciones, pero el hecho de que Isaac no recibiera respuesta inmediata, no significaba que Dios no estaba oyendo, el escucho cada oración, pero mando la bendición en el tiempo correcto. Nosotros debemos mantener la fe, orar, obrar, y, en el tiempo exacto, Dios va a mandar la bendición. Pensemos en eso durante este día, y, actuemos.
OREMOS:
Padre Amado, venimos hoy a ti, llenos de alegría para agradecerte por todo. Escucha nuestras oraciones, y, envía tu milagro en el tiempo correcto, asi como hiciste con Isaac. Colabora con nosotros. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen