Lucas 11:1 “Aconteció que estaba Jesús orando en un lugar, y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: Señor, enséñanos a orar, como también Juan enseñó a sus discípulos. “
Amados que la Paz de Dios, sea con todos. Feliz día, la reflexión bíblica es: una actividad placentera, que hay que disfrutarla con aquella forma clásica, de la manera adecuada, para que impacte positivamente en nuestras acciones cotidianas, y, así podamos además de cumplir la voluntad de Dios, logremos ser mejores siervos cada vez, o, incluso, inspirar a nuestro prójimo a andar por los caminos de salvación.
Jesús estaba orando en cierto lugar y cuando Jesús termino su momento devocional, uno de sus discípulos se acerco y le dijo para que los enseñara a orar, así expresa el texto bíblico, es un ejemplo de vida nuestro Señor, una vida devocional profunda, Jesús en todo el tiempo que estuvo en este mundo, mantuvo una comunión, una relación, con su padre en el cielo, dejándonos un claro ejemplo, vemos en los evangelios en varios momentos, a los evangelistas, describiendo a Jesús en momentos de oración, y, no hay duda de que Cristo hacia eso no solo por la necesidad que el sentía, sino también por la conciencia que tenia, de que al hacer eso y ser observado por los apóstoles, su ejemplo los inspiraría, y, ellos relatarían ese habito de Jesús, para que fuéremos inspirados, por el ejemplo del Señor, a tener una vida devocional, cuando ellos le pidieron a Jesús que los enseñara a orar, ese pedido, alegro el corazón del Señor, porque él se alegra cuando oramos, con certeza esa solicitud de aprender a orar, de ser enseñados a orar, eso hizo que Jesús se alegrase, porque Jesus sabia, y, el siempre sabe, que cuando decidimos vivir en oración, la puerta se abre para que la bendición de Dios sea recibida, y la victoria sea alcanzada, probablemente conozcamos el texto de 2 Crónicas 7:14, que establece ¨si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.¨, Dios da a entender que la oración es un acto de humildad, quizá por eso las personas mas simples son las que oran mas, porque cuando oramos nos humillamos, reconocemos nuestra fragilidad, nuestra dependencia, nuestra carencia, nuestra insuficiencia, Dios dice ¨Si mi pueblo se humilla, y, Ora, y, buscara mi cara, y, se desviaren del mal camino por estar en la presencia del Señor¨ el pueblo de Dios se desvía del mal camino, pues en la presencia del Señor, es imposible pecar, entonces Dios promete sanar la tierra. Bendito sea el nombre del Señor, el nos da bendiciones materiales, y, perdona nuestros pecados, alabado sea el nombre del Señor que nos da bendiciones materiales y bendiciones espirituales. Aprovechemos de orar.
OREMOS
Amado Padre, ayúdanos por favor en estos momentos de dificultad, enséñanos a orar para abrir nuestros corazones a ti, para ser mejores siervos y hacer tu voluntad en todo momento. Apóyanos siempre. Peticiones que te hacemos en nombre de Jesús. Y, agradecemos, pues sabemos que vas a obrar en nuestro favor.
Amén.