1 Reyes 17:17-18 ¨ Después de estas cosas aconteció que cayó enfermo el hijo del ama de la casa; y la enfermedad fue tan grave que no quedó en él aliento. Y ella dijo a Elías: ¿Qué tengo yo contigo, varón de Dios? ¿Has venido a mí para traer a memoria mis iniquidades, y para hacer morir a mi hijo? ¨
Amados, que Dios nos bendiga a todos, como siempre lo hace, iniciando con la bendición del gozo que nos capacita para ser mejores siervos, y, esparcir el mensaje de Dios por todo lugar, igualmente nos motiva a actuar en cumplimiento a la voluntad del Padre Celestial, para conducir a las almas a los caminos de salvación.
Esta mujer aquí era una viuda pobre que vivía a las afueras de Israel, y, cuando el profeta Elías es enviado a esa mujer, para que le dé un poco de comida, incluso no teniendo nada ella decidió ayudar al profeta, porque él era un hombre de Dios, y, que la bendición de Dios estaba sobre el, y, consecuentemente estaría sobre ella también, y, de hecho cuando ella se dispuso a ayudar al profeta, la biblia dice que el poco alimento que la mujer tenía en su casa, fue multiplicado por el poder del Señor, y, allí todo parecía muy bueno, hasta que el hijo de aquella mujer enfermo, y, murió, aquella señora debió haber orado bastante, mientras su hijo estaba enfermo, pidiéndole al Dios de Israel, que estaba ayudándole con alimento, que le ayudase ahora con la cura de su hijo, mientras tanto el texto nos dice que el muchacho se enfermó, la enfermedad se agravo, y, el murió, y, en ese momento la mujer se acerca al profeta Elías y dice estas palabras, ¨¿Qué tengo yo contigo, varón de Dios? ¿Has venido a mí para traer a memoria mis iniquidades, y para hacer morir a mi hijo? ¨, palabras que expresan la irracionalidad de un corazón adolorido, aquella mujer asocio su problema con el profeta y con Dios, ella imagino que estaba siendo penada por causa de sus errores del pasado, muchas veces pasamos por situaciones que no comprendemos y quedamos frustrados, desanimados, y, desesperados, llevando nuestras preguntas presentes en la mente, la biblia nos dice que el profeta Elías, sensibilizado por la situación, agarro al muchacho, y, lo llevo, al aposento donde el profeta dormía, y, el oro a Dios fervorosamente, pidiéndole a Dios que resucitara al niño, y, Dios hizo que la bendición se produjera, y, resucitado, el profeta Elías se lo llevo a su madre, y, cuando fue entregado el hijo para la madre, ella dijo: ¨Yo se que eres un hombre de Dios, y, las palabras de Dios en tu boca son verdaderas¨. El mensaje de esta escritura, es que muchas veces nos ilusionamos con el pensamiento, y, creemos que estando en los caminos de Dios, tendremos una vida de permanente alegría, pero así no es, la verdad es que abran pruebas, batallas espirituales, y, Precisamos vencerlas con fe, y, oración. Hablando de oraciones, vamos a orar por fortaleza.
OREMOS
Adorado Padre Celestial, fortalécenos ante todas las dificultades que se nos presenten, queremos cumplirte, alabarte y glorificarte con nuestras conductas, para agradarte, y, dejar un buen ejemplo al prójimo, para que siga tus caminos. Contribuye con nosotros. Te lo pedimos en el nombre de Jesucristo.
Amén.