11 de Julio: Paz de verdad

Juan 14:27 ¨ La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo. ¨

 

 

Amados, con la actitud apropiada estudiaremos hoy la Biblia, muchas enseñanzas importantes, la palabra de Dios nos trae, y, si queremos tener una mejor vida, precisamos practicar, cada uno de los postulados previstos en este sagrado libro, el cual recoge toda la voluntad de Dios. Llevemos esta palabra a nuestra comunidad, nuestro prójimo la requiere, y, nosotros les bendeciremos de esta buena manera.

 

 

Este texto que encabeza este material, contiene palabras de consuelo, a los discípulos que estaban pasando por un momento tremendo, lleno de incertidumbre, ellos tenían dificultad para comprender, el momento que Cristo vivía, y, estaba próximo a vivir, ese día Jesús les había dicho a los discípulos que estaba en la inminencia de morir, próximo a pasar por el martirio de la Cruz, el moriría en nuestro lugar, pero los discípulos tuvieron dificultad para comprender ese mensaje, porque ellos esperaban al Mesías como rey triunfante, y, no entendieron que el Mesías primero sería un ser sufridor, primero debería dar su vida por nosotros, entonces, los discípulos estaban angustiados todos, y, les era imposible comprender esos dichos de Jesús, pero percibieron que la oposición a Cristo aumentaba cada día, en ese contexto fue que Jesús dijo estas lindas palabras, contenidas en el versículo, para que evitaran alterarse, la idea era estar tranquilos, porque sea lo que sea, ellos deberían resolver en el momento adecuado, para poder ejercer el ministerio que Jesús les habría dejado, a todos los discípulos y especialmente a Pedro, en la creación de la iglesia cristiana primitiva. Cuando nosotros tenemos la paz de Cristo, podemos avanzar con seguridad, porque la paz de Jesús es diferente a la paz del mundo, porque en el mundo la paz es sinónimo de ausencia de guerra, los que viven en paz, tienen una vida tranquila, pero cuando la adversidad acontece, y, los problemas surgen, esa paz del mundo que es superficial, que es condicional, se consume, pero cuando tenemos la paz del cielo, que es la paz de Jesús, entonces, permanecemos tranquilos, porque sabemos dónde esta nuestra seguridad, y, mantenemos una tranquilidad que nos permite conducirnos mejor en todo tiempo, e, incluso, mantener una salud optima, porque no estamos contaminándonos con pensamientos negativos.

 

 

 

OREMOS

 

Amado Padre, contigo todo es especial, gracias por todo, capacítanos para experimentar tu paz, y, vivir tranquilos en todo tiempo. Colocamos nuestras vidas en tus manos para que nos conduzcas a un mayor nivel espiritual, y, a una vida de calidad. Te pedimos que contribuyas con nosotros. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.

 

Amen.

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