Mateo 12:35-37 “El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas. “-“Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio. “-“Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, agradezcamos a nuestro Padre Celestial por esta nueva oportunidad de vivir y estudiar la palabra que nos orienta a seguir firmes en nuestro camino hacia la salvación, donde es muy importante mantener autocontrol y disciplina para seguir íntegros cada uno de los mandatos previstos por nuestro Creador, manteniendo la miranda fija en el cumplimiento de su voluntad. Palabras esperanzadoras y de motivación nos expone el Señor, esas son las que debemos seguir y compartir con nuestro prójimo.
Nuestra lengua es un musculo poderoso del cuerpo, es llena de sensibilidad al punto de que cada parte de la lengua siente un diferente sabor, así como la impresión de nuestras huellas digitales, la lengua es única en cada persona, Dios es maravilloso en su creación y la lengua que el nos dio es una bendición, pero ese musculo de apenas diez centímetros también puede ser una maldición, esta vez no en la función de los sentidos, pero si en la función del habla, usar mal la lengua puede causar mal a los otros, y también a nosotros mismos dependiendo de lo que hablamos, muchos autores de la psicología recomiendan mantener el silencio el mayor tiempo posible, para controlar los impulsos de la lengua y evitar hablar de informaciones indebidas, aquí se hace oportuno recordar la frase de Beethoven la cual expresa «Nunca rompas el silencio si no es para mejorarlo». Hubo un momento en que Jesús fue falsamente acusado de que hacia sus milagros a través de ayudas de demonios, para responder a sus acusadores Jesús pregunto a sus acusadores si podía un árbol malo dar buenos frutos. En el conjunto de versículos de hoy, Jesús estando en la situación de conversar con sus acusadores, dijo lo expresado en el texto, lo cual nos indica la importancia de las palabras y su cuidado, el texto no quiere decir que nuestras palabras van a definir nuestra salvación o perdición, palabras frívolas se refieren a palabras improductivas e inútiles, palabras que son de la boca para afuera, o que no tienen ningún valor, para ser justificadas en Cristo las palabras deben estar en armonía, en coherencia, las palabras comprueban la coherencia o comprueban la hipocresía, Cristo fue condenado y acusado por hombres que habían hablado palabras bonitas pero llenas de hipocresía que por dentro eran como arboles sin frutos, mientras crucificaban a Cristo él era el mayor ejemplo de palabras que tenían armonía con su fruto y con su vida, entonces, que seamos buenos en el uso de las palabras y demostremos buenos frutos, ese es el propósito de Dios, de esa manera habrá coherencia entre lo que hablamos y lo que hacemos, esa coherencia de nuestras vidas será factor importante para que nuestro testimonio sea positivo, y así Dios nos use para influenciar a los otros para el camino del Señor, Dios nos bendiga, vivamos lo que predicamos y prediquemos lo que vivimos, así nuestras vidas serán bendición, luz de Dios en este mundo de oscuridad.
OREMOS:
Padre querido, gracias por este tiempo precioso, donde nos llenas de conocimiento y nos orientas para tener una vida mejor, fortalécenos para poder hacerle frente a todas las situaciones de la vida con buen ánimo. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.