Marcos 6:48 “Y viéndoles remar con gran fatiga, porque el viento les era contrario, cerca de la cuarta vigilia de la noche vino a ellos andando sobre el mar, y quería adelantárseles.¨
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Una historia en la biblia que nos habla de Zaqueo, nos indica que debemos crear condiciones para que nada impida nuestra relación con Dios, otra historia en la biblia la de Jonás, nos muestra lo que acontece cuando queremos ignorar voluntariamente la voz de Dios, procuremos acercarnos más a Dios, llenarnos de conocimiento de su palabra, predicar, llevar el mensaje a otras personas y ganar almas para que anden por los caminos de Cristo.
El peligro en el mar es una de las peores circunstancias que se puede pasar, porque es una situación que causa una sensación de impotencia e inseguridad, donde el miedo parece asumir el control de la situación, en esos momentos se piensa que no hay mas salida. En el pasaje de hoy conseguimos una situación parecida, Jesús había atravesado el mar de Galilea, estaba con los discípulos para buscar un lugar tranquilo donde pasar la noche o quién sabe si era llorar la muerte de Juan, al llegar al otro lado la multitud que estaba siguiendo a Jesús va detrás de él y Jesús atiende a todos, en esa ocasión además de curar a los enfermo él multiplico los panes y peces, al final del día el despide a la multitud, le dice a los discípulos para atravesar el lago y solito el sube al monte para orar, cuando fueron entre las tres y las seis de la mañana, el vio la dificultad que sus discípulos estaban pasando, e inmediatamente fue al encuentro de ellos para socorrerlos. ¿Hemos pasado por tormentas en nuestras vidas?. Sepamos que Jesús no esta omiso, no esta indiferente, el sabe lo que esta ocurriendo, e inmediatamente se coloca a disposición, no apenas para ayudar sino para socorrer, para librarnos y salvarnos, la vida con Jesús no es una póliza de seguros contra problemas pero es la garantía de la presencia de él sin importar la circunstancia, es la prueba de que Dios no nos libra de los problemas pero promete estar con nosotros en medio de estos, jamás nos sintamos pequeños, solo miremos a Dios porque el tiene el poder para ayudarnos y darnos la victoria.
OREMOS:
Padre de amor, colocamos en tus manos todas nuestras actividades, sentimientos y pensamientos para que conforme a tu voluntad nos guíes hacia un mejor lugar, queremos cumplir tu voluntad. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen