Juan 21:24-25 “ Este es el discípulo que da testimonio de estas cosas, y escribió estas cosas; y sabemos que su testimonio es verdadero. ” – “ Y hay también otras muchas cosas que hizo Jesús, las cuales si se escribieran una por una, pienso que ni aun en el mundo cabrían los libros que se habrían de escribir. Amén.”
Amados, que el Señor nos bendiga y su paz este con todos. La palabra de Dios hará diferencia en nuestras vidas, lo vamos a ir notando progresivamente en nuestras maneras de reaccionar ante las diversas situaciones, de pronto nos impresionaremos con nuestras respuestas asertivas. Seguramente lo veremos.
Es interesante ese escrito de Juan porque en la biblia nosotros podemos encontrar cuatro bibliografías de Jesús, los cuatro evangelios, tres son bastante parecidos, Mateo, Marcos, Lucas y Juan, semejantes en su forma pero el cuarto evangelio de Juan es diferenciado eso se da por el hecho de que los evangelistas estaban escribiendo para públicos distintos, en el texto de hoy nosotros podemos encontrar algunas informaciones bien importantes, primero el testimonio contenido en este evangelio escrito por Juan fue dado por alguien que convivio muy cerca de Cristo, el era llamado de símbolo de amor, por eso él se llama discípulo, alguien que sigue de cerca los pasos de su maestro todo con el objetivo de adquirir el mayor conocimiento y tornarse semejante al maestro, aunque ya muchas cosas Jesús hizo, no todos los caminos que recorrió, ni todas las informaciones están recopiladas en textos, pero ha sido registrado lo suficiente como para que creamos en el como nuestro salvador, no existirían papeles ni bolígrafos suficientes para describir todo lo que hizo Jesús, y quien escribió este evangelio fue uno de los discípulos amados de Jesús, su evangelio contiene historias que los otros apóstoles no contaron, el público objetivo de Juan fueron las personas que nunca vieron a Jesús personalmente, el escribió para una iglesia que estaba al borde de la destrucción a causa de la persecución, por falsas doctrinas y desconfianza de que Jesús era el mesías, en momentos de nuestras vidas podemos sentirnos así, perseguidos, desconfiados y con la fe destruida, pero la buena noticia es que el mensaje de Juan también es para nosotros, para que no desistamos, para que sigamos firmes en la fe.
OREMOS:
Padre de amor, ayúdanos a mejorar cada vez en el camino de la salvación, permite que podamos cumplir siempre tu voluntad y convertirnos en siervos agradables a ti. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen