Mateo 11:2-4 ¨ Y al oír Juan, en la cárcel, los hechos de Cristo, le envió dos de sus discípulos, para preguntarle: ¿Eres tú aquel que había de venir, o esperaremos a otro? Respondiendo Jesús, les dijo: Id, y haced saber a Juan las cosas que oís y veis. ¨
Que la paz de Dios sea con todos, es posible que sintamos placer al recibir regalos, este material es un regalo que Dios nos da, y, con él, nos recuerda que: Debemos estar gozosos, y tener fe siempre, Dios nos favorecerá, él tiene el control de todo, y, nunca dejara caído al justo. Obedezcamos al Padre, y, llevemos este material a todo nuestro prójimo, para bendecirles, y brindarle buen ejemplo de obediencia a Dios, ese es uno de los mejores regalos que podemos darle a alguien.
La biblia relata que Juan Bautista, comía, y se vestía de manera simple, todo su amor y dedicación estaba destinado a anunciar la venida del Cordero de Dios, a este mundo, el anunciaba y esperaba, entonces, después que bautizo a Jesús, y, haber sido preso, Juan Bautista paso algunos momentos de conflicto. Según este texto bíblico, que encabeza este material, Juan Bautista esperaba que el Mesías, que tanto anunciaba actuaria de manera más política, destruía a los romanos que mal trataban a los Judíos en aquella época, o quizá establecer su reino con espada, poderes, y fuego, pero el Mesías vino para los humildes, débiles y necesitados, pero no por eso dejaría de ser Mesías, así como Juan tenemos el derecho de cuestionar, de tener dudas, o de no entender, pero Cristo dará respuestas, y esas respuestas, no siempre serán las que esperamos, pero viniendo de Jesús, siempre serán verdaderas, aceptemos la verdades de Cristo, porque son regalos, y por esos regalos debemos estar agradecidos, es eso lo que la palabra de Dios nos enseña, hoy el don del cielo está disponible para nosotros, solo hagamos como Juan, esperemos pacientemente, esperemos al Mesías, y anunciemos su pronto regreso, de esa manera ayudaremos a otras personas a conocer el plan de la salvación.
OREMOS:
Padre Adorado, gracias por tu palabra hoy, que nos enseña a tener paciencia para esperar tu regreso, a anunciar tu pronta venida, y a convidar a nuestro prójimo a prepararse para ese momento especial. Ayúdanos siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amén