Salmos 51:4-5 ¨ Contra ti, contra ti solo he pecado, Y he hecho lo malo delante de tus ojos; Para que seas reconocido justo en tu palabra, Y tenido por puro en tu juicio. He aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre.¨
Que la Paz de Dios sea con todos, y, su misericordia nos alcance. Una vez mas nos reunimos para atender a la instrucción de Dios, y con ese conocimiento poder practicar la voluntad de Dios en nuestras vidas. Aceptemos la invitación a compartir este mensaje con nuestro prójimo, como se indica en el versículo Marcos 16:15.
David era el hombre mas poderoso de la tierra, era el rey de Israel, sin embargo, el tuvo la humildad de reconocer ante Dios sus fallas, David asumió el rostro de alguien que llora al ver su error, aquí esta una gran lección para nosotros, muchas veces dañamos a las personas, que están cerca de nosotros, hacemos algo que perjudica a quienes amamos, también lastimamos el corazón del Padre celestial, pero no importa lo grande de nuestro error, debemos tener la humildad, para acercarnos a Dios y decir ¨Señor, soy pecador, ten misericordia de mi¨, David complementa su oración diciendo ¨Si el Señor fuese a reprenderme y castigarme, o incluso a quitarme la vida, haría eso con razón pues soy merecedor de ser condenado por todos los males que cometí¨, de la misma forma debiéramos reconocer que si fuese por nosotros mismos, estaríamos eternamente condenados, pero al mismo tiempo, debemos creer en la misericordia de Dios, en su gracia y fidelidad, gracias a eso envió a su hijo Jesús, a morir por nosotros para rescatarnos del pecado, por eso hoy es un día de oportunidad para restaurar la comunión con Dios, lo mas importante es no esconder nuestras fallas, porque Dios sabe todo sobre nosotros, lo que Dios desea es que tengamos un corazón sensible a su voz, por eso la invitación de hoy, es a dejar de lado el pecado, a abandonarlo totalmente, confesémoslo y abandonémoslo, el Señor va a darnos victoria.
OREMOS:
Padre de amor, permítenos acercarnos a ti, para confesarte nuestras fallas en este tiempo, ayúdanos a mejorar nuestras conductas y ser más agradables a ti. Contribuye con nosotros. Peticiones que te hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.