Apocalipsis 1:9 “Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo. ¨
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Iniciar cada día teniendo la oportunidad de estudiar la palabra bíblica es un gran beneficio que nos fortaleces en nuestra caminata cristiana y nos provee de firmeza de carácter para poder tomar decisiones adecuadas y apegadas a la voluntad de Dios.
Pensemos en una isla desierta, bañada por las aguas del mar Egeo, abrazada por las deslumbrantes puestas de sol, a muchos nos gustaría estar de vacaciones en un lugar así, o quién sabe si tuviéremos la oportunidad de hacer un crucero, desembarcar en ese lugar y pasar algunas horas de placer y diversión, realmente hoy podemos conocer esa isla, pero esa no es el tema del día de hoy, Juan no está en Patmos de paseo, él está preso por motivo de la fidelidad a Cristo, y a su palabra, y mientras estaba prisionero, el anciano apóstol soporto varias dificultades en el exilio, siendo obligado a realizar trabajos forzosos, para Juan todo lo que estaba allá representaba dolor, sufrimiento, tribulación y separación de las personas a quien el amaba, lo que podemos aprender de todo eso es que ser cristiano no siempre fue sinónimo de popularidad, ser cristiano no es sinónimo de una falsa teología de la prosperidad o de una vida sin problemas, el cristianismo bíblico no es una religión de ganancias, pero si una religión de perdidas, sobre ¿Qué estamos dispuestos a perder por amor a Jesús?, esa es la nota tónica, ¿Cuál ha sido nuestra isla de Patmos?, nunca olvidemos que cuando nos encontremos cercados por un mar de problemas nosotros no estamos solos, la experiencia de Patmos siempre resulta en una revelación dada por Jesucristo y así como Jesús fue para allá a visitar a Juan a esa isla desierta, para bendecirlo y traerle esperanza, él va a hacer lo mismo cuando estemos viviendo nuestro Patmos personal.
OREMOS:
Padre de amor, si estamos pasando por un momento difícil en nuestras vidas, si nos estamos sintiendo atrapados en una isla solitaria, queremos que el buen cristo, que tu espíritu nos conforte en este dia, que nosotros sintamos alegría de tu presencia, que sintamos tu amor y que sepamos de los planes que tienes para nosotros. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen