2 Pedro 3:10 “Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas. “
Amados, que la Paz de Dios sea con todos. Es como siempre un placer estar aquí reunidos, para alimentarnos espiritualmente, con la palabra de Dios, quien nos ama demasiado, y, nos instruye con amor, para que tengamos una vida más bonita, y, podamos llevar a más almas al camino de la Salvación. Difundamos este material, y, contribuyamos a llevar a más almas, a los caminos de bendición.
El fuego, tiene un alto poder de purificación, por tal motivo es utilizado para la purificación de materiales, e, instrumentos, eliminando cualquier impureza, la Biblia nos presenta que en un escenario donde el mundo está totalmente contaminado por el pecado, siendo necesario que sea hecha una total purificación, esto va a acontecer mediante el fuego Divino, en el versículo, que encabeza el material de hoy, podemos entender un poco más sobre este tema. En el contexto cultura en que el apóstol Pedro escribió esa carta, el concepto de fuego purificador era familiar, la práctica de quemar campos para fertilizarlos, y, purificar materiales en el fuego, eran imágenes poderosas, para describir el juicio de Dios, la destrucción por el fuego, mencionada en la segunda carta de Pedro, es una referencia directa al juicio final. Así como el diluvio purifico la tierra una vez, el fuego será el medio por el cual Dios eliminara al mal. El Nuevo Testamento, usa 2 palabras griegas, para referirse a infierno: ¨Ades¨ y ¨Gueena¨, la primera de ellas Ades, es usada para hablar del sepulcro, o, lugar donde la persona es sepultada, y, la segunda Gueena, es un símbolo del fuego consumidor del último gran día de juicio, y, el castigo de los pecadores, notemos que el infierno, del texto de la segunda carta de Pedro, representa al Gueena, mostrando que el infierno será un fuego consumidor, que: purificara a la tierra del mal, destruyendo a Satanás, y, a quienes practican la inequidad, mientras renueva la tierra para su estado original. PERO ¿Cuánto tiempo durará esa purificación?. Algunas expresiones bíblicas, presentan al infierno como fuego eterno, que jamás se apagara, pero es importante entender que ese eterno, no se refiere a duración de evento, pero si al tipo de consecuencia, el infierno es la expresión de la segunda muerte, algo irreversible, sin posibilidad de retorno, un resultado, con consecuencias eternas, la biblia no enseña un infierno eterno de tormento, pero si un fuego que cumple su propósito, que es erradicar el pecado para siempre, Dios no viene a la tierra para destruirla, sino para purificarla de todo mal, lamentablemente aquel que permanezca con el mal en su corazón, también serán destruidos por el fuego purificador, entendemos que un día, la tierra será purificada, pero: ¿Cuánto tiempo más esperaremos para que Dios purifique nuestros corazones?, aprovechemos hoy esa oportunidad.
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OREMOS:
Padre Amado, en este momento nos colocamos en tus manos, y, te pedimos que guies nuestros pasos, para que en lugar de experimentar destrucción eterna, en lugar de sufrir consecuencias del fuego eterno, que disfrutemos de la gracia bendita de nuestro salvador. Colabora con nosotros. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen