Filipenses 4:7 ¨ Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.¨
Queridos hermanos, ¡que la gracia y la paz de nuestro Señor Jesucristo sean con todos!. Él nos envuelve ahora mismo en su amoroso abrazo, fortaleciéndonos con esta palabra dulce y poderosa. Alabemos a Dios por todas las maravillas que hace por nosotros, por medio del Espíritu Santo nos renueva cada día, y, nos proporciona todo lo que necesitamos para vivir una vida abundante. Sigamos su voluntad y compartamos su amor con todos. Repliquemos e ste mensaje en todo lugar.
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Muchas veces nos encontramos en medio de situaciones delicadas, la vida en sí misma es una situación delicada, que hay que asumir con paciencia total, ir avanzando de a poco, pero con la mirada firme en Dios, y, en cumplir su mandato. Ya que la ansiedad y el estrés parecen ser compañeros constantes, muchas veces sentimos que el mundo gira tan rápido, que muchas veces es difícil levantarnos y continuar, las diversas preocupaciones nos agobian, pero si al caso vamos la preocupación es la necesidad de hacer algo antes de realizar la acción, en ese sentido oremos para aplacar las preocupaciones. Este texto de hoy, es la garantía del pronto socorro de Dios, en todas las situaciones que nos alteren en nuestro estado emocional, imaginemos que estamos en un barco en medio del océano, y, una tempestad agüita el mar a nuestro alrededor, las olas son altas, el viento es fuerte y parece que no hay salida, y, allí golpea el desespero, de pronto más allá en la distancia, vemos un farol, ese farol no es asi no es para la tempestad, el no detiene la tempestad, pero el ofrece una guía, un camino seguro hasta el puerto, enfocados en ese farol podremos llegar a un puerto seguro, y, colocarnos en tierra firme, de la misma manera actúa la paz de Dios, la Paz de Dios no quita necesariamente todos los problemas de nuestro ambiente pero nos aporta los métodos necesarios para superarlos, la paciencia total es uno de esos métodos para conservar la calma en situaciones difíciles, esa calma nos aporta serenidad y claridad para navegar en medio de los problemas, somos invitados a buscar esa paz, la cual no es entendida por el mundo, porque no depende de circunstancias externas, es una paz que se abriga en el corazón y transforma la mente, que podamos sentir la paz que solo Dios puede dar a nuestros corazones, y, que nuestros pensamientos sean de seguridad en Dios, y, no de desespero, de esta manera alabamos a Dios, y, el se siente agradado porque percibe nuestra confianza en el. Pensemos en eso cada dia.
OREMOS
Querido Padre Celestial, agradecemos tus dulces caricias al revelarnos tu palabra, y, en general al operar en todas nuestras vidas, guía nuestros pasos hacia un mejor destino. Prepáranos, fortalécenos, protégenos, pues queremos agradarte cada vez, y, convertirnos mediante tu paz en instrumentos de tu bendición. Te lo pedimos en el nombre de Jesucristo.
Amén.