Juan 14:26 ¨Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.¨
La Paz de Dios sea con todos, con todo lo que nos ocurra, solo tengamos paciencia, y calma por causa de la fe, porque todo va a resolverse en algún momento, por el poder de Dios. Llevemos esta palabra a nuestro prójimo amado, que requiere de nuestra acción en la extensión de la palabra de Dios.
Con miedo y tristeza, los discípulos vieron y escucharon, cuando Jesús anuncio su muerte, cuando fueren privamos de su presencia, ¡Quien seria su maestro amigo?, conociendo la necesidad de ellos, Cristo decidió enviar a su representante para estar con ellos, a quien llamo ¨Consejero¨, que es la traducción de la palabra griega Paracletos, formada por la preposición Para, que quiere decir al lado, y Cletos, llamado. Literalmente, significa, alguien llamado para estar al lado de él, dando la idea de una persona llamada para ayudar a alguien, también puede referirse a un mediador, a un intercesor, a un ayudante, hasta a un abogado asistente, solo Juan uso el termino PARACLETOS, curiosamente el aplico esa palabra a Jesús en otras oportunidades, durante su ministerio, Jesús fue ayudante, consejero, asistente, facilitador, por tanto es apropiado que su sucesor reciba el mismo nombre, el Espíritu Santo continua la obra de Cristo en la tierra, por medio del Espíritu Santo, los discípulos tenían la presencia de Jesús, y desde siempre el Espíritu Santo, ha ejercido esa labor de guiarnos por el camino correcto, si le buscamos de todo corazón, si nos dedicamos al estudio de la biblia y a la practica de la voluntad de Dios en nuestras vidas, tengamos eso presentes a lo largo de este día y procedamos de la manera correcta. Seguramente, seremos bendecidos.
OREMOS:
Padre Amado, gracias por haberte convertido en hombre, para entender nuestros dolores, para saber cómo nos sentimos, para ayudarnos siempre y fortalecernos para sobreponernos a las adversidades en tu nombre. Ampáranos siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amén