Mateo 12:31-32 ¨Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada. A cualquiera que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el venidero.¨
Amados, ahora mismo es el momento de reencontrarnos con Dios, conocer sobre su voluntad, y, practicar sus mandatos en nuestras vidas, para ser bendecidos, y, agradarle mucho, lo mejor de todo es que cuando el Padre Celestial, se da cuenta de que hacemos su voluntad, el comienza a obrar en nuestro favor, de manera permanente, ya que entiende, que estamos esparciendo su obra por todo lugar. Compartamos este mensaje, para bendecir a nuestro prójimo, y, seguir dando el ejemplo correcto. Algo grande está por venir, apropiémonos de esa afirmación.
El Señor Jesús, está refiriéndose aquí a un pecado único, imperdonable, que es el pecado contra el Espíritu Santo, mucha gente tiene dificultad para entender ese tema, y, algunos a causa de la falta de entendimiento quedan asustadas, pero nosotros debemos estar tranquilos, porque aún no hemos pecado contra el Espíritu Santo, porque estamos aquí escuchando la palabra de Dios, toda sensibilidad a la voz de Dios es un signo de que estamos siendo atraídos por el Espíritu Santo, para llegar a Dios. Esto es algo bueno, y, merece felicitación, porque es parte del proceso en la vida de todo Cristiano, sentir gusto por conocer sobre la palabra, lo mejor de todo es que hay un nivel superior, que se presenta, cuando sentimos ese deseo genuino de hacer la voluntad de Dios en nuestras vidas, y, con la acción que desarrollamos logramos ayudar a otros, eso es magnífico, y, agradable a Dios, en tal sentido, procuremos actuar de esa manera. Con seguridad va a irnos bien, y, vamos a dar un lindo ejemplo al prójimo.
OREMOS:
Padre amado, gracias por todo, contigo todo es especial, requerimos de tu constante acción en nuestras vidas, para vivir mejor, gracias siempre, ayúdanos a poder sentir cada vez mas ese deseo por alimentarnos de tu palabra, y, obrar según tu voluntad. Peticiones que hacemos en nombre de Jesús.
Amen.