Lucas 2:34-35 ¨ Y los bendijo Simeón, y dijo a su madre María: He aquí, este está puesto para caída y para levantamiento de muchos en Israel, y para señal que será contradicha (y una espada traspasará tu misma alma), para que sean revelados los pensamientos de muchos corazones.¨
Amados, que la Paz de Dios, sea con todos, que seamos llenados de energía positiva. Consideremos que para construir una buena edificación, deben realizarse los pasos correctos, durante varios días, por tanto, precisamos mantenernos concentrados a cada paso, para realizar una obra de óptima calidad, perseveremos en nuestras obras, y, principalmente, en la obra que desarrollamos para el Señor, prediquemos, evangelicemos, y, brindemos un buen ejemplo, basado en el cumplimiento de la voluntad de Dios. Así llevaremos a nuestro prójimo, a los caminos de salvación. Diseminemos este material.
Estas hermosas palabras fueron proferidas por un hombre llamado Simeón, el nombre de este hombre, es mencionado una vez en el nuevo testamento, esta escrito que él era un hombre piadoso que vivía en la expectativa de la venida del Mesías, y, cuando María y José, llevaron al niño Jesús para ser presentado en el templo, aun recién nacido , el Espíritu Santo le revelo a Simeón, que ese niño era el Mesías, y, entonces el tomo a Jesús en los brazos y glorifico a Dios, por haber tenido el privilegio de ver al mesías, y, en ese momento Simeón le dijo a María madre del niño, las palabras reveladas en el texto bíblico, porque quería explicar que por medio de Jesús, unos iban a ser exaltados, elevados, y, otros serán arruinados, derrotados, el seria objeto de contradicción. Precisamos entender que Simeón aquí, movido por el Espíritu Santo, estaba profetizando, que Jesús causaría división, porque unos lo aceptarían, y, serian salvos, mientras otros lo rechazarían, y, por eso permanecerían condenados, y, arruinados. Ahora cuando Simeón le dice a María que: ¨Una espada atravesara su alma¨, aquí Simeón profetiza sobre el dolor que María iba a sentir, cuando se encontrara frente a la Cruz, observando lo que acontecía con Jesús, sin reaccionar, a pesar de tener poder para hacerlo. Es interesante, como el evangelio se torna objeto de contradicción, porque mientras unos se encantan con el mensaje de salvación, otros ridiculizan ese mensaje, que es de salvación, pero por eso es que Jesus dice que el no vino a la tierra a traer el mensaje de paz, y, sin espada, porque cuando el evangelio llega a una casa, unos aceptan, y, otros rechazan, todo depende de cómo reaccionamos al evangelio, cuando aceptamos somos elevados, salvos por medio del mensaje, pero cuando lo rechazamos ese mensaje que vino a salvarnos, coopera para nuestra condena, que Dios se compadezca de nosotros, y, que el evangelio sea para nuestra elevación, nuestra salvación, porque lo recibimos sinceramente.
OREMOS:
Adorado Padre, permanece con nosotros, continúa la obra en nuestras vidas, para que cada día seamos más sensibles al evangelio, y, que Jesucristo sea nuestro verdadero Salvador y Señor de nuestras vidas. Ayúdanos siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amén.