Jueces 16:23-25 ¨ Entonces los principales de los filisteos se juntaron para ofrecer sacrificio a Dagón su dios y para alegrarse; y dijeron: Nuestro dios entregó en nuestras manos a Sansón nuestro enemigo.¨-¨Y viéndolo el pueblo, alabaron a su dios, diciendo: Nuestro dios entregó en nuestras manos a nuestro enemigo, y al destruidor de nuestra tierra, el cual había dado muerte a muchos de nosotros.¨-¨Y aconteció que cuando sintieron alegría en su corazón, dijeron: Llamad a Sansón, para que nos divierta. Y llamaron a Sansón de la cárcel, y sirvió de juguete delante de ellos; y lo pusieron entre las columnas¨
Padre nuestro, que tu gracia y tu paz nos alcance en todo momento, agradecidos estamos por este maravilloso día, la oportunidad especial de compartir tu palabra bendita siempre es valorada por nosotros, deseamos agradarte mediante alabanzas considerando este texto como símbolo para tu glorificación, instrumento con el cual se pretende contribuir a la evangelización de tu pueblo.
Amados, la historia de Sansón se repite en muchas de nuestras vidas en mayor o menor grado, pues somos personas que fuimos traídos a existencia con un propósito específico dado por Dios, sin embargo nos dejamos llevar por las olas del mundo perdiéndonos en el camino. Sansón tenía todo para ser un gran hombre pero fue muchas veces menor a causa del deseo de la carne, porque tenía problemas morales, pudiera haberlos superados y alcanzar victoria pero no fue así, por su propia elección. Ahora bien, nosotros debemos estar claro en nuestra elección en caso de elegir pecar o elegir obedecer a la voluntad de Dios. En los versículos de hoy, se relata sobre la situación difícil que vivió Sansón cuando todos los príncipes filisteos que pagaron a Dalila para traicionarlo lo humillaron y Dios dio respuesta a la última oración de Sansón, se le concedió fuerza pero él se ofreció en auto sacrificio y allí en mato más personas que nunca antes, él tuvo que decidir así para cumplir la voluntad de Dios. Nosotros también debemos tomar una decisión radical, si notamos que nos estamos dirigiendo al abismo y levantarnos para seguir el camino de salvación que nos ofrece Dios, si el observa nuestra fidelidad nos dará una nueva oportunidad, trayéndonos la esperanza de días mejores, busquemos hoy a Dios.
OREMOS:
Padre adorado, tu conoces todo sobre nosotros, perdona nuestros pecados y ofensas, calma aquellas pasiones que nos alteran. Perdona nuestros pecados y cumple tu propósito en nuestras vidas. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen