Efesios 5:6-7 ¨ Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia.¨-¨No seáis, pues, partícipes con ellos.¨
Padre nuestro, este día traemos una grandiosa interpretación de tu palabra, con el objetivo de contribuir a causas cambios radicales en aspecto positivos para todos los que nos nutrimos de estos escritos, extiende tu bendición sobre el mismo, pues con este texto queremos alabarte, glorificarte y esparcir tu mensaje a través de este medio.
Amados, en el mundo hay personas que intentan influenciar a otros, mediante diversas estrategias maliciosas, induciéndolos a falsas percepciones de la realidad, para sacarles provecho sin importarles el daño que le causan a su prójimo, este hecho desagrada al padre, cuando nos dejamos llevar por ideas erradas de otros que solo desean destruirnos, pero nosotros debemos impedir que se cumplan estos fines pero con amor, lo importante es que la esencia del texto nos lleva a estar atentos sobre las personas con quien nos relacionamos y los pensamientos, sentimientos y emociones que elegimos para vivir, porque ellas causan efecto inmediato en nuestras conductas y resultados. En este sentido, Dios nos doto del libre albedrio, con el fin de que podamos decidir dentro de los parámetros de bondad y crecimiento, en lugar de envolvernos en influencias negativas. Así pues, nuestro padre, que nos quiere ver siempre bien, nos exhorta a acogernos a la obediencia a sus mandatos, para apartarnos de los ataques del enemigo, haciéndonos merecedores del tesoro celestial y que para vida eterna que nos tiene reservado Dios.
OREMOS:
Padre Amado, en ti confiamos siempre, sabemos que deseas lo mejor para nosotros, reconocemos que en contadas ocasiones nos desviamos de la conducta que nos estas enseñando, sabemos que eres tardo para la ira y severo en la corrección, vigila nuestras acciones, cuida nuestros actos para evitar desviarnos de tus caminos, colócate al frente y guianos para poder ser merecedores de tu bendición. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen