Marcos 15:21 ¨Y yo me suscitaré un sacerdote fiel, que haga conforme a mi corazón y a mi alma; y yo le edificaré casa firme, y andará delante de mi ungido todos los días.¨
Padre nuestro, este día traemos una grandiosa interpretación de tu palabra, con el objetivo de contribuir a causar cambios radicales en aspecto positivos para todos los que nos nutrimos de estos escritos, extiende tu bendición sobre el mismo, pues con este texto queremos alabarte, glorificarte y esparcir tu mensaje a través de este medio.
Amados, Continuemos confiando en Dios, así miremos a los lados, así algunas cosas no tengan sentido para nosotros, sigamos firmes en la fe, porque Dios podrá revertir cualquier situación debido a que nada es imposible para el, como dice la canción de Juan Luis Guerra, refiriéndose a nuestro Señor Jesús, ¨Para ti no hay nada imposible¨. El versículo de hoy, indica que a un hombre que estaba con sus hijos en Jerusalén, lo obligaron a cargar la cruz de Jesús, en aquel momento no fue nada agradable cargar la cruz, ya que fue una situación de mucha humillación, pero ahora que sabemos que esa fue la cruz de Jesús, puede ser contado aquel acto de cargarle como un privilegio. Nadie ayudo a Jesús en nada, solamente ese hombre. En los primeros momentos era una situación horrible, deplorable, todos maldiciéndole, pero posteriormente fue considerado un privilegio haber ayudado al Salvador. De tal manera, que en nuestras vidas, quizá nos toque hacer algo humillante pero que posteriormente pueda ser considerado un privilegio. Prestemos atención a las situaciones que ocurren, procedamos bien para posteriormente no tener arrepentimientos ni cargos de conciencia, actuemos bien para que la negatividad no nos alcance, hagamos la voluntad del padre para ser bendecidos cada día mas.
OREMOS:
Padre Amado, en ti confiamos siempre, sabemos que deseas lo mejor para nosotros. Gracias por concedernos en abundancia las bendiciones que te pedimos. Permite que siempre hagamos tu voluntad y mejoremos constantemente Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen
INTERACTUEMOS:
Teniendo conocimiento de la enseñanza expresada en la Biblia sobre el punto en cuestión, cuéntenos lo siguiente:
¿Qué beneficio le trae aplicar esta palabra a su vida?
¿Cree que este conocimiento pudiera contribuir a mejorar sus andanzas por el camino de Dios?
¿Tiene algún comentario final sobre la lectura?