Lucas 17:2 ¨ Mejor le fuera que se le atase al cuello una piedra de molino y se le arrojase al mar, que hacer tropezar a uno de estos pequeñitos.¨
Padre nuestro, gracias por constantemente extendernos tu favor, también por la generosidad de conceder nuestras peticiones y atender a nuestras suplicas que con genuina fe practicamos diariamente. En este momento continuamos esparciendo tu palabra y pedimos que cubras con tu manto protector a todos los que forman parte de este ministerio, generadores de material, compartidores del material, y a todos los que están envueltos de alguna manera en la evangelización
Amados, este es un ministerio que pertenece a todas las denominaciones religiosas, donde lo importante es esparcir la corriente de bien, alabar a Dios llevando su mensaje, practicando continuamente los mandatos previsto por el. El versículo de hoy contiene un mensaje radical referido a que es mejor apartarse, a actuar con intensión de dañar a sus hijos, en la aplicación practica esto es una amonestación a aquellas personas que tienen por costumbre pisotear a otros para sentirse mejor, ganarse un puesto mayor en alguna organización mediante la perturbación a sus semejantes, esos individuos que sienten placer al destruir a los demás. Por esta razón nosotros debemos ser responsables de aquellos que tienes una fe en formación, necesitamos ser luz en la vida de ellos y de los demás integrantes de nuestro prójimo que requieran ayuda, Dios quiere que seamos una bendición en la vida de las personas, que nuestras vidas marquen la diferencia en el aspecto positivo en la vida de otros, y entendamos que nuestra diaria misión es predicar el evangelio mediante el ejemplo, levantando a personas y llevándolas al camino de la fe, en lugar de ser obstáculos para cualquiera.
OREMOS:
Dios Querido, gracias porque tenemos la seguridad de que siempre estas con nosotros y jamás nos abandonaras, permanece siempre a nuestro lado, gracias porque mueves tu mano en nuestro favor, permite que nuestros corazones sean purificados para seguir con obediencia tu mandato y demostrar nuestra fe sincera, para llegar al reino celestial. Ayúdanos a ser luces en la vida de las personas y no conducir a nadie al error o al tropiezo. Son nuestras peticiones, que llenos de fe hacemos en esta oportunidad en nombre de tu hijo Jesucristo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen