Isaías 10:1-2 ¨!!Ay de los que dictan leyes injustas, y prescriben tiranía,¨-¨ para apartar del juicio a los pobres, y para quitar el derecho a los afligidos de mi pueblo; para despojar a las viudas, y robar a los huérfanos!¨
Dios amado, hoy dando cumplimiento con las previsiones de tu palabra, estamos siguiendo con apego tu mensaje para agradarte, llevando el amor para con nuestro prójimo, ese amor que nos muestras cada día. Continuamos predicando y orando sin cesar para llevar la palabra de salvación. Bendice este texto y que cumpla los fines evangelizadores consiguiendo transformaciones positivas, una lluvia de bendiciones en todos aquellos que consiguen imprimir en sus corazones tu mandato. Permítenos mostrarte nuestra fidelidad compartiendo tu palabra, bendice la vida de todos los que formamos parte de este ministerio principalmente de quienes llevan el mensaje a sus semejantes.
Amados, estemos activos en todo tiempo a la hora de esparcir amor, beneficios y favores al prójimo, amemos con sinceridad y abundancia, así como Dios nos ama, él siempre nos lo ha demostrado. Dios descanso en el séptimo día de la creación y desde allí no se ha detenido, siempre nos ha amado a cada segundo, correspondamos a ese amor y compartámoslo con nuestros semejantes. En este versículo, plantea que en nuestras naciones existen reformas que tienen como objetivo perjudicar al prójimo, para empeorar la vida de los ciudadanos, aumentando los impuestos y aumentando la corrupción, porque en lugar de retornar esos impuestos en una mejora en los servicios y programas gubernamentales, ellos solo buscan llenar sus bolsillos y darle menos retorno al pueblo, cuestión distinta seria que se cobraran menos impuestos para darle mayor oportunidad al trabajador de gozar de su salario, pero es como es, Dios hara justicia por nosotros y todos seremos juzgados, por tanto nuestros legisladores deberían ser obedientes a Dios y beneficiar a la ciudadanía con las leyes que creen.
OREMOS:
Padre bondadoso, hoy queremos pedir para nuestros legisladores, para que los orientes en tomar decisiones que fortalezcan la calidad de vida de la ciudadanía, que puedan obrar conforme a tus mandatos, que sean obedientes a tu palabra. Así te lo pedimos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen