Job 1:1 “Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. “
Amados, que la Paz de Dios sea con todos. La dirección hacia una vida de santidad, nos la otorga Dios, por este y otros motivos, debemos cumplir completamente sus mandatos, debido a que su voluntad, es que seamos bendecidos, para bendecir, y, proteger a otros. Encaremos este día, con la biblia en la mano, Jesús en el corazón, y, las bendiciones a montón. Continuemos brindando un buen ejemplo al prójimo, y, compartiendo esta palabra de esperanza.
Este versículo, expone las palabras introductorias del libro de Job, un hombre que vivió una historia tremenda, que puede ser motivación a muchos de nosotros, para mantener la constancia en los proyectos, perseverar en la fe, e, inclusive seguir andando, cuando las circunstancias son las peores, cuando la noche es más oscura, porque con seguridad, eso quiere decir, que pronto llegara la mañana, y, la luz del sol brillara de nuevo. El libro de Job, fue escrito por Moisés, otro hombre excepcional, del cual en principio se burlaron por carecer de cualidades para liderar al pueblo de Dios, pero Dios le favoreció increíblemente, para que practicara la obra en nombre de Dios. Moisés escribió este libro, aproximadamente en el año 1500 antes de Cristo, cuando Moisés vivía entre los Medianitas, eso antes de haber liderado el éxodo, que fue la salida del pueblo de Israel, de Egipto. Haber escrito este libro, fue una fuente motivadora, para su propio autor, es decir Moisés, la mayor parte de este libro fue escrito en forma de poema, pero la historia es real, no es algo alegórico, Job era un hombre integro y recto, cualidades que hacen destacar al pueblo Cristiano, Job era un hombre irreprensible, sincero, y, justo, un hombre correcto, que daba, y, sigue dando un buen ejemplo, mas ahora en estos tiempos cuando vemos una falta tremenda de integridad, por todos lados, muchas veces nos decepcionamos, con personas que consideramos correctas, como por ejemplo muchos políticos, muchos gobernantes, y, hasta pastores, pensamos que estas son personas correctas, pero al observar los actos de estas personas, simplemente nos decepcionamos, pues vivimos una crisis de falta de integridad. Job es un ejemplo, de hombre irreprensible, sincero, y, correcto, además, el tenia temor a Dios, es decir, lo respetaba en todo, Job prestaba su lealtad, y, obediencia a Dios. Job vivía en un contexto, donde las personas adoraban a diversas divinidades, pero Job, permanecía leal al Dios creador del cielo y la tierra, temer a Dios aquí tiene el sentido, de estar centrado en Dios, enfocado en cumplir la voluntad de Dios, de priorizar el reino de Dios, de vivir para gloria de Dios, temer a Dios es reverenciar y obedecer a Dios, y, Job se desviaba del mal, se desvinculaba del pecado de raíz, Job seguía al bien, esas primeras palabras del libro de Job, hacen recordar a las primeras palabras del libro de Salmos, recogidas en el versículo Salmos 1:1 ¨ Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;¨, Job era el vivo ejemplo, de esta afirmación hecha en el versículo de Salmos 1:1, si Job escuchaba un consejo de un impío, simplemente lo oía por educación, pero lo ignoraba en su totalidad, Job evitaba mezclarse o juntarse con gente inconveniente, Job evitaba asociarse con los malos, con aquellos que evitaban a Dios, eso es lo que es evitar al mal, que Dios nos bendiga, y, que podamos seguir el ejemplo de Job, sobretodo porque esta sociedad requiere de buenos ejemplos, y, nosotros debemos convertirnos en esos buenos ejemplos de obediencia a la voluntad de Dios, destaquemos por eso.
OREMOS:
Padre Amado, contribuye con nosotros, y, permite que logremos convertirlos en buenos ejemplos para el prójimo, que seamos una especie de antorchas que iluminan el camino en la oscuridad, favorécenos siempre, porque queremos cumplir contigo, en todo- Colabora con nosotros. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.