2 Samuel 19:35 “De edad de ochenta años soy este día. ¿Podré distinguir entre lo que es agradable y lo que no lo es? ¿Tomará gusto ahora tu siervo en lo que coma o beba? ¿Oiré más la voz de los cantores y de las cantoras? ¿Para qué, pues, ha de ser tu siervo una carga para mi señor el rey? “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, hoy llenos de energía nos disponemos a estudiar la palabra de un Dios misericordioso, amoroso y de paz, que todo el tiempo orienta nuestros pasos en el avance por el camino a la salvación. Siendo conscientes de esta realidad vale la pena seguirle, debido a que el quiere lo mejor para nosotros, por ello cumplamos su voluntad y prosperemos de su mano.
Nuestro personaje bíblico de hoy es poco conocido, su nombre Barzilai, el acogió al rey David cuando este huía de Absalón que le había usurpado el trono, David y los hombres leales a él atravesaron el rio Jordán, en la fuga y llegaron a Manain, donde tienen un encuentro con Barzilai que era un hombre generoso y con muchas posesiones, quien por estar dispuesto a honrar al rey y a sus hombres con el sustento, contribuyo con ellos durante su estadia en aquel lugar donde estaban refugiados, la biblia dice que el era muy viejo, que tenia aproximadamente 80 años, y él sostuvo al rey mientras este estaba en Manain, porque el era un hombre muy rico, veamos que después que el ejército de David venció a Absalón, llego el momento del rey David atravesar el río Jordán, nuevamente para regresar a Jerusalen, allí David se quedó de pie, a las orillas del rio Jordan para ver quien atravesaría con él, el rio, muchas personas se presentaron para acompañar al rey e ir a Jerusalen, y David quería llevarse a Barzilai, para retribuirle todo lo que este había hecho por el y su equipo durante el tiempo de refugio, pero pensando en la edad avanzada, Barzilai declino de la invitación del rey David. Barzilai no quiso aceptar la invitación de rey porque tenía una edad avanzada, eso denotan las palabras de este versículo, porque sería pesado al rey y no era necesario que el rey le recompensara por los actos de bondad realizados en su favor durante el tiempo de refugio, entonces tomada la decisión, Barzilai regresa para su casa y el rey David sigue su camino a Jerusalén, esta historia nos hace imaginar nuestra realidad en relación al Señor Jesús, pronto Jesús regresara y nos convidara a cruzar el Jordán junto a él, pero de nada servirá si vivimos aquí cumpliendo la voluntad de Dios y luego rechazáramos la última invitación para ir con él al cielo, renovemos ahora mismo nuestra entrega a Dios para estar preparados para el momento oportuno cuando Jesús regrese y podamos aceptar su invitación a avanzar junto a él. Esa es una gran bendición.
OREMOS:
Padre querido, la historia de Barzilai nos muestra la necesidad de tener concordancia con nuestros actos, que precisamos comprometernos en cumplir tus mandatos y hacer tu voluntad en todo momento, a saber que tus deseos para nosotros son los mejores y es por eso que seguirte se convierte en un placer. Queremos agradarte, por eso ayúdanos. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.