Éxodo 7:13 “Y el corazón de Faraón se endureció, y no los escuchó, como Jehová lo había dicho. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, las misericordias del señor se han renovado hoy, y con ellas la posibilidad de estudiar su palabra, compartamos este material con nuestro prójimo para ayudarlo a conseguir el camino que lleva a la vida eterna.
Todo el día, en todo momento y en todos los lugares, Dios esta trabajando para que el ser humano sea impresionado por su amor, el lenguaje del cielo es salvación, lo cual significa restaurar al hombre a imagen de Dios, si Dios es amor, el plan de la redención es devolver al hombre la naturaleza amorosa, y esa elección de aceptación es hecha por el propio hombre, Dios nos dio la libertad para que todos nosotros hagamos nuestro camino, la acción divina es dar la oportunidad y permitir que el hombre tenga libre arbitrio y construya su vida, nosotros no podemos olvidarnos que nuestras decisiones, nos aproximaran de la voluntad de Dios o nos apartaran de ella, pero son nuestras decisiones, así como a cada momento Dios está trabajando para salvación de la humanidad, a cada instante debemos lanzar mano de esas oportunidades, buscar atraparlas, coger las oportunidades que Dios crea en nuestro camino, en la historia de liberación del pueblo de Israel de alla del cautiverio de Egipto, el cual duró aproximadamente 400 años, la oportunidad fue dada también para los Egipcios, para que ellos aceptaran al Dios verdadero, esa oportunidad comenzaba con el propio faraón, nosotros vemos en la historia como el faraón rey de Egipto, va paso a paso rechazando las manifestaciones divinas para ser salvado, Dios quería salvar al faraón, salvar a los Egipcios pero ellos fueron rechazando sistemáticamente toda oportunidad, y ese rechazo constante hacen que el corazón quede endurecido. La historia exhibida puede repetirse en nuestra vida, a medida de que rechazamos las iniciativas divinas para ser salvados, la tendencia natural es que nuestro corazón se endurezca y se aparte del Señor. La biblia nos enseña que el Espíritu Santo es una persona divina, es el agente que trabaja en nuestra mente para llevarnos a la madurez espiritual, y a un cambio de actitud, el nunca deja de hablarnos, somos nosotros quienes nos apartamos de él, el espíritu esta siempre allí pero nosotros no lo oímos, es posible que alguna vez hayamos rechazado las invitaciones divinas, muchas veces Dios ha hecho cosas para demostrarnos su amor y cuidado, pero quizá hemos reaccionado de un modo displicente, entonces, la invitación para hoy es que aprovechemos las oportunidades que él nos otorga, a pesar de que la Biblia dice que hoy es el día de la salvación no es mañana o después de mañana, por eso en este momento vamos a orar para que en todos los momentos percibamos las acciones divinas para salvarnos, para que no rechacemos el toque del Espíritu Santo, para que esas palabras lleguen a nuestro corazón.
OREMOS:
Padre querido, cada día tu Espíritu Santo está trabajando en nuestros corazones, permite que su instrucción y trabajo se manifieste en nuestras vidas, que podamos obedecer a sus recomendaciones. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.