Salmos 3:5 ¨ Yo me acosté y me dormí; desperté, pues el Señor me sostiene.¨ / Salmos 4:8 ¨ En paz me acostaré, y asimismo dormiré; Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado.¨
Amados, que la paz de Dios sea con todos. Hoy estamos en un momento crucial, dónde precisamos tomar una decisión, de la cual va a depender nuestra vida eterna, precisamos expresar con determinación, si vamos hacia el camino del bien, o, hacia el camino del mal. Pero más que solo decirlo, es necesario tomar acciones que revelen nuestro cumplimiento a la voluntad de Dios, nuestro Padre percibirá, esa actitud poderosa, y, va a favorecernos en cada área de nuestras vidas.
Quizá podemos estar pasando por todo tipo de situaciones, posiblemente estemos alterados por alguna de ellas, pero precisamos oír, entender y obrar conforme a lo que expresa David, él decía, que: podía dormir tranquilo, porque su confianza estaba puesta en el Señor. David a pesar de pasar muchas dificultades, él permanecía durmiendo en paz, cuando debía hacerlo, porque su seguridad estaba puesta en DIOS. Aunque David estaba durmiendo fácil, su vida estaba dañada, llena de tormentas y caos, este hombre el rey de Israel, tuvo momentos tremendamente difíciles, durante su reinado y su vida, eso por cuenta de la maldad de otros para con el, y, con Israel, y, también por causa de errores que el propio David cometió, y, que algunos de los israelitas también cometían, y, hacían que el rey sufriera, David tuvo una familia grande, y, problemática, entonces la vida de el no era fácil, ni era tranquila, pero recordemos que David, vivía en paz porque su confianza estaba colocada en el Señor. Alguien dijo que fe, es transferencia de confianza, cuando colocamos la confianza en el Señor, quedamos en paz, porque conocemos que Dios es capaz de hacer todas las cosas, él es OMNIPOTENTE, OMNISCIENTE, y OMNIPRESENTE, es decir, que tiene todo el poder, sabe de todo, y, está en todo lugar. Cuando colocamos nuestra confianza en Dios, tenemos seguridad, por eso es que le dice a Dios, que gracias a él, puede dormir tranquilo. David delante de sus aflicciones, se acostaba, y, oraba, colocando todo en las manos de Dios, y, pidiéndole a Dios para resolver para conducir, para guiar, para proteger, alguien dijo que la oración tranquiliza nuestros corazones, fortalece nuestras decisiones, y, nos conduce a un contacto personal con Dios, eso es lindo, pues la oración tranquiliza nuestro corazón, fortalece nuestras decisiones, y, nos conduce a un contacto personal con Dios, nuestro Padre, observemos que la oración no hace que Dios baje hasta nosotros, pero nos eleva a su presencia, y, esto es un privilegio para cualquier ser humano, que privilegio es saber que cuando oramos, somos elevados a la presencia de Dios, y, creamos que quien vive en la presencia del Señor, no tiene que temer nada, porque como dice Pablo ¨ Si Dios es por nosotros, ¿Quién será contra nosotros?¨.
OREMOS:
Padre Amado, coloca en nosotros la confianza, que colocaste en David, ayúdanos a todos los que sufrimos de insomnio, para que podamos dormir bien, confiando en ti, y, que siempre tendrás la palabra sanadora, la palabra de bendición, la mejor solución. Contribuye con nosotros siempre. Así te pedimos, y, clamamos a ti padre, en el nombre de Jesucristo, nuestro Señor.
Amén