Efesios 1:7 ¨ en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia.¨
Padre nuestro, llenos de placer por generar este contacto contigo nos encontramos todos reunidos para conforme a tu palabra, para perfilar nuestra caminata hacia la santidad de la manera apropiada, de la forma que indicas en tu disposición, abre nuestro entendimiento para comprender la importancia de la transmisión de este mensaje esperanzador mediante las redes sociales y en nuestro día a día, permite que este material pueda continuar acercando personas a tus caminos y que se continúe haciendo tu voluntad. Favorece a tus siervos e igualmente provee al necesitado.
Amados, la continuidad de la oración por todas las causas, se ha convertido en una práctica que ha impactado positivamente en las vida de muchas personas las cuales comparten por diversas vías su mensajes y a todos agradecemos su lectura constante, e igualmente seguimos invitando a muchos más a continuar interactuando con nosotros, también hasta a dejar sus comentarios en las entradas, ello es fortificante para todos los que intervenimos en este ministerio. En el versículo de hoy, recibimos una orientación de que solo en Jesús podemos ser redimidos de nuestros pecados por Dios, este perdón viene dado en proporción a sus riquezas en gracia, lo que viene a ser lo mismo que un perdón entregado de manera sobreabundante, sin embargo, Dios requiere que luego del pecado, los comisores nos abstengamos de volver a caer y nos mantengamos andando en sus caminos para corresponder al amor que el nos ha manifestado. Igualmente, como Jesucristo con su sacrificio nos perdona, justifica, santifica y nos salva de la influencia del pecado, nosotros no necesitamos estar atormentados por la culpa, el miedo o la inseguridad, a causa de nuestros pecados, ya que Dios nos redimió con la sangre de Jesús, en tal sentido, requerimos olvidar aquello que queda atrás, el pasado y proseguir hacia el objetivo que es Jesús realizando firme andanza por los caminos del señor, tengamos eso presente, recibamos el perdón y perdonémonos nosotros mismos, de manera que consigamos percibir la presencia de Dios con nosotros, calmando nuestros corazones y convirtiéndonos en nuevas criaturas si decidimos seguirle de manera obediente.
OREMOS:
Santo Dios, tú que eres el ser Omnipotente, fuente de toda santidad y salvación, queremos venir para agradarte mostrando concordancia entre nuestros dichos y nuestras acciones las cuales hemos entregado totalmente a tu obra, queremos manifesarte que en ocasiones podemos vernos tentados a salirnos del camino por todas aquellas formulas de ataque del enemigo, pero sabemos que estamos contigo y que nadie nos vencerá porque estamos en tu compañía, intercede por nosotros para que puedas sanarnos de cualquier actitud contraria a tus mandatos. Son nuestras peticiones, que llenos de fe hacemos en esta oportunidad en nombre de tu hijo Jesucristo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen
INTERACTUEMOS:
Amados, en esta oportunidad para hacer efectiva observancia a la dirección que nuestro padre nos indica en esta palabra bendita, invitamos a COMPARTIR una vez más, dando lectura al texto:
Perdón reciproco
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