Marcos 1:34 ¨ Y sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y echó fuera muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios, porque le conocían. ¨
La paz del Señor colme nuestras vidas y las bendiciones sean mayores cada vez. Hoy señor, considera este texto como una obra de alabanza a tu reinado eterno, permite encaminar a las personas a mejorar notablemente sus pasos en el camino hacia la obra del bien.
Amados, todos sabemos que Dios nos ama, el siempre esta con nosotros, pero necesitamos sentir esta cuestión, todo eso es posible mediante la comunión con nuestro creador a partir de la generación de una relación optima con él, orar para pedir y agradecer por sus bendiciones es fundamental, además de eso tomar las escrituras bíblicas y leer alguno de los tantos libros contenidos en el antiguo y nuevo testamento, recordemos que nuestra relación intima con Dios comprende varias cuestiones que exigen cierto compromiso e integridad. De acuerdo al versículo de hoy, muchos fueron sanados pero no todos, eso ocurrio no por el hecho de que nuestro padre tenga hijos preferidos, sino porque entre los presentes no todos tenían plena fe en Jesus, esa fe en el Salvador fue lo fundamental para obtener la sanación, algo similar ocurre en los días actuales, muy pocos tienen fe de que el milagro se materializara en sus vidas si obedecen plenamente el mandato de Dios, cuando ciertamente ocurren cambios positivos para victoria y bendición para aquellos que en el confían.
OREMOS:
Padre amado, permítenos acrecentar la calidad del vinculo que nos une a ti, haz que nos logremos sentir cada vez mas motivados a conocer de tu obra e implementar actos de bondad para causar bendición en la vida de tu prójimo. Así pedimos, en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.