Salmos 46:10 ¨ Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra. ¨
Amados, que la Paz de Dios, sea con todos. Felicidades a todos, continuemos con esta costumbre tan positiva, de estudiar la Biblia, y, reflexionar sobre estos materiales. Sigamos adelante en esta tarea, y, cumplamos la voluntad de Dios, ya que así nuestras vidas mejorarán, y, contribuiremos a mejorar las vidas de los demás, al dar un buen ejemplo.
¿Cuánto tiempo le dedicamos a Dios diariamente?, ¿Dedicamos algún momento en silencio para pensar?, ¿Estamos reflexionando sobre lo que Dios tiene para decirnos?, siempre de preferencia al inicio de cada día, es necesario que hagamos una pausa para reflexionar, sobre lo que la biblia nos dice, sobre lo que la palabra del Señor tiene que decirnos, por eso el salmista dice que paremos y reconozcamos, que el es Dios, el salmista, estaba hablando en nombre del Señor, con las actividades diarias, es común que seamos llevados por la corriente de las preocupaciones, responsabilidades, y demás, pero es necesario meditar en el consejo del Salmista, y, tomar un tiempo para estar en silencio, ahora cuando decimos de estar en silencio, ello no quiere decir estar sentado en el sofá sin hacer nada, es más sobre dejar las tareas cotidianas de un lado, para permitir que nuestro corazón y mente se calmen, y, puedan esclarecer el ruido que nos distrae, así podremos enfocarnos, en tener un momento para conectarnos con Dios, recordar que él es Dios, reconocer quien es él, reconocer su presencia en nuestras vidas, ese espacio es el momento oportuno para dedicar un momento a conocer más a Dios, reconocer su poder y dirección en nuestras vidas, deleitarnos en su maravillosa creación, al ver como el pinta el cielo al amanecer, y, nos muestra a cada día que él es un Dios TODOPODEROSO, y, su amor por nosotros es infinito, recordando también que el es nuestro refugio y fortaleza, no, no importa cuál sea el desafío o las incertezas, que nos esperan, Dios está con nosotros, ahora pensemos en lo increíble que es entregar a diario todas nuestras preocupaciones a él, solo requerimos confiar en su promesa de que el, estará con nosotros, guiándonos, protegiéndonos siempre, si queremos reservar un espacio para estar en silencio meditando, reflexionando todos los días, hagámoslo desde hoy, que en este día, empecemos a crear ese hábito, para que seamos bien orientados por Dios. Estemos quietos, cumpliendo la voluntad de Dios, seguramente, y, con certeza, seremos bendecidos.
OREMOS:
Amado Padre, ayúdanos a estar quietos, mas calmados, pudiendo cada día, estudiar tu palabra, reflexionar, y, meditar en ella, para que dirijas nuestras vidas de una manera hermosa, y, podamos agradarte con nuestros actos de obediencia. Son las peticiones que hacemos, en nombre de Jesucristo.
Amen