2 Crónicas 21:20 ¨ Cuando comenzó a reinar era de treinta y dos años, y reinó en Jerusalén ocho años; y murió sin que lo desearan más. Y lo sepultaron en la ciudad de David, pero no en los sepulcros de los reyes.¨
Dios Adorado, hoy venimos ante ti, llenos de alegría por tener el placer de compartir tu palabra bíblica que es alimento que nutre nuestras almas y produce cambios significativos en nuestros corazones, hacemos este estudio como símbolo de alabanza para tu glorificación, bendice este material para que cumpla el objetivo evangelizador, y perfeccione la conducta de tus servidores.
Amados, este es un verso interesante de la biblia que indica que un individuo fue rey por mucho tiempo, reinó y luego murió sin que nadie sintiera nostalgia por él, existen personas así que muren sin dejar nostalgias de nadie, nadie se acuerda de ellos debido a que no realizan obras de envergadura en favor de nadie, más bien pretendieron dañar durante sus vidas, eso nos lleva a preguntarnos ¿De qué manera estamos construyendo nuestra vida?. ¿Encima de vicios, de juegos, alcohol, estafas, entre otros?. Es la hora de tomar nuestra vida en serio y construir un legado, nosotros no somos eternos, requerimos realizar obras de envergadura en favor de otros comprendiendo primero que para ayudar a otros debemos ayudarnos a nosotros mismos, la vida requiere ser más que una simple rutina casa, – trabajo – casa, para conseguirlo requerimos traer significado a la vida, ayudando a otros con nuestras obras, cuando morimos nuestras vidas continúan a través de nuestros hijos, por eso es esencial la construcción de un presente sólido, haciendo obras de envergadura.
OREMOS:
Dios bondadoso, ayúdanos a permanecer en tu verdad solamente, a construir un presente solido realizando obras de envergadura en favor de nuestro prójimo, jamás nos desampares, ni permitas que nos abandonemos o dejemos de satisfacer nuestras propias necesidades. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen