Lucas 6:27-28 ¨ Pero a vosotros los que oís, os digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen; bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian.¨
Amados, reciban la bendición del gozo, ahora mismo. Muchas veces hay ciertas cosas que Dios permite que acontezcan, y, que probablemente, no comprendamos al inicio, ¿por qué razón ocurren?. Pero siempre, es para nuestro bien, y, debemos aceptar con mucha fe esa voluntad de Dios, porque lo mejor esta por venir. En tal sentido, perseveremos obedeciendo a la voluntad de Dios, pues, todo va a salir bien, si cumplimos con él. Ahora, brindemos el buen ejemplo, compartamos este material, y, llevemos el mensaje de salvación al mundo entero.
Esas palabras hermosas, fueron expresadas en el Sermón de la Montaña, qué Jesús profirió a sus discípulos y a una gran multitud de personas, en ese sermón Jesús enseña sobre el amor hacia los enemigos, y, la importancia de la compasión para con aquellos que nos odian, tremendo reto. Seamos honestos, y, sinceros, si es difícil amar a quienes nos aman, será, es más difícil amar a quienes nos odian. A veces dudamos hasta de quienes nos aman, imagínense con los enemigos, sin duda es más difícil, es fácil decir esta enseñanza pero es complicado ponerlo en práctica, porque es contraria a la naturaleza humana, nuestra tendencia es responder al odio con más odio, dejando por fuera esa regla de pagar al odio con amor, por eso Jesús nos llama a actuar de manera diferente, y, amar a nuestros enemigos como a nosotros mismos, este mensaje fue una bomba, para todas las personas en aquel tiempo, y, hasta hoy es, amar a nuestros enemigos no significa que debemos poner en riesgo nuestra integridad física, nuestra salud emocional, pero significa que nosotros debemos sobrellevar y diluir nuestras emociones negativas, y buscar ser testimonio del amor de Dios, en la biblia hay muchos ejemplos de personas que respondieron con amor a las situaciones difíciles, uno de esos ejemplos es David, el rey David, quien fue perseguido por el Rey Saul quien quería matarlo, pero en lugar de responder, discutir, u, oponerse, David respeto su posición, y, espero pacientemente por el momento correcto, para convertirse en el próximo rey de Israel, David nos muestra que es posible responder con amor, incluso, en situaciones que nos pondrían con odio, debemos luchar contra las emociones negativas, y, convertirnos en testimonios del poder de Dios, mostrando compasión y bondad, para con aquellos que nos hieren, para quienes nos lastimaron, eso no es fácil, pero, con el poder de Dios, seremos capacitados para lograrlo. Por la gracia de Dios lograremos hacerlo.
OREMOS
Padre amado, así como condujiste a David a superar esos momentos de angustia, y, lo llevaste a soportar con paciencia los ataques de él Rey Saúl, para lograr aguardar con paciencia, el momento preciso para asumir el reinado de Israel. Concédenos la capacidad para amar a nuestros enemigos, para convertirnos en testimonios de tu poder. Son las peticiones que te hacemos en nombre de Jesucristo.
Amen.