Isaías 12:2 ¨ He aquí Dios es salvación mía; me aseguraré y no temeré; porque mi fortaleza y mi canción es JAH Jehová, quien ha sido salvación para mí.¨
Padre celestial, en esta hora te damos gracias por la oportunidad que nos otorgas de poder compartir, adorando tu nombre para tu gloria, padre te pedimos que nos expreses la enseñanza de bendición que en este momento va a nutrirnos. Coloca tu bendición en la palabra del texto para que transmita el conocimiento apropiado para la salvación de tu prójimo.
Amados, la desesperación y angustia que en ocasiones nos ataca por influjo del enemigo, puede llevarnos a cometer errores. Para evitar que este ataque nos alcance, debemos esparcir más amor al prójimo, como manera de amar a Dios. El versículo de hoy, muestra que Jesús es la salvación, la resolución, cuando el entra en nuestras vidas, todo el resto es mejorado, todo progresivamente va llegando a un nivel superior de bondad y mejoría, cuando entra Jesus a ser lo primero y lo mejor en nuestras vidas, las bendiciones llegan, nos tornamos obedientes a sus mandatos, entonces el responde favoreciéndonos en nuestros caminos. De este modo lograremos tener una perspectiva diferente, conservaremos la calma, nos mantendremos en paz, porque tendremos la plena seguridad de que Dios está en el control del barco que nos conducirá a un mejor lugar, entonces declaremos como lo hizo Isaias,¨ Dios es nuestra salvación, en cualquier entorno donde nos encontremos, él tiene el control y nos bendecirá
OREMOS:
Padre de bondad, entregamos a ti el control de nuestras vidas, gracias por todas las bendiciones que nos concedes, especialmente por ser nuestra salvación, tu nos das la certeza de días mejores bajo tu cuidado, deseamos servirte para cumplir el objetivo para el cual fuimos creados, para que de ese modo podamos alabarte y glorificarte. Peticiones que te hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.